La capsulitis adhesiva del hombro, también conocida como hombro congelado o capsulitis retráctil, se caracteriza por una pérdida progresiva de la movilidad, principalmente de la rotación externa, asociada a dolor intenso (omalgia). El dolor puede despertar al paciente por las noches.
La capsulitis adhesiva es mas frecuente en mujeres que en hombres y suele producirse entre los 40 y 70 años, además puede asociarse a diabetes o alteraciones tiroideas aunque no es una constante.
La capsulitis adhesiva afecta la articulación gleno-humeral y según estudios científicos, se desencadena por la falta de movilidad del hombro, por ejemplo secundaria traumatismos, intervenciones quirúrgicas, fracturas, tendinitis, calcificaciones tendinosas, etc. La falta de movilización del hombro produce disminución de la circulación linfática y sanguínea, lo que genera atrofia muscular, fibrosis y engrosamiento de la cápsula articular con aumento de fibras de colágeno, adherencias por depósitos de fibrina y pérdida de elasticidad en la articulación.
-En la evolución de la capsulitis adhesiva, hay 3 fases:
1ra. Fase de capsulitis adhesiva: Dura entre 2 y 9 meses caracterizándose por dolor intenso y progresivo, con franca limitación de la movilidad.
2da. Fase de capsulitis adhesiva: Duración de 4 a 12 meses, se caracteriza por importante rigidez y limitación de la movilidad con menor dolor. Suele haber atrofia muscular.
3ra Fase de la capsulitis adhesiva: También llamada fase de descongelación, que dura entre 4 y 9 meses y se caracteriza por mejoría progresiva de la movilidad y reducción del dolor.
En promedio la duración total de la capsulitis adhesiva es de 24 a 36 meses.
El mejor método diagnóstico para detectar la capsulitis adhesiva es la resonancia magnética (RM) de hombro, en la que se puede reconocer engrosamiento capsular en el sector antero-inferior y de su repliegue inferior como se puede apreciar en las siguientes imágenes. Además hay cierto colapso de los recesos capsulares.
SECUENCIAS DE RM EN CAPSULITIS ADHESIVA.
RM CAPSULITIS ADHESIVA.
En los estudios de PET/TAC con inyección de 18 fluorodeoxiglucosa, se pueden apreciar cambios inflamatorios en el hombro y la región axilar, aunque es menos específica.
Aunque hay publicados artículos sobre la posibilidad de diagnosticar la capsulitis adhesiva por ecografía, el porcentaje de detección es extremadamente bajo, es decir de una muy baja sensibilidad.
El tratamiento de la capsulitis adhesiva en general se inicia con técnicas de fisioterapia y osteopatía. Se induce una movilización pasiva en los diferentes arcos, intentándose dar laxitud a una cápsula rígida, engrosada y retraída, lo que produce intenso dolor en algunos pacientes y por lo que hay que recurrir a la ingesta de analgésicos, o incluso a la realización de un bloqueo de la sensibilidad neural por medio de una infiltración guiada previo a la movilización.
Las infiltraciones con corticoides intra-articulares, guiadas por medio de ecografía o radioscopía, suelen dar buenos resultados terapéuticos. Las infiltraciones asociadas a técnicas de hidro-dilatación articular, también dan un buena respuesta al dolor y la movilidad reducida.
Como último recurso se puede realizar una artroscopía quirúrgica a los fines de realizar micro-secciones de la cápsula y liberar adherencias.
Las infiltraciones de Ac. Hialurónico intra-rticular han dado resultado en algunos pacientes.
Se están investigando otras alternativas terapéuticas para la capsulitis retráctil como la inyección de colagenasa intrarticular para producir cierta lisis fibrosa.